Insólito bochorno musical-geopolítico
RBD vive papelón en Perú gritándole al público “¡Arriba Chile!”
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El sexteto mexicano, que arrasa en cada país donde se presenta, esta vez se ganó una rechifla generalizada de parte del respetable del país vecino, que obviamente se encolerizó con la increíble confusión. (TERRA.cl)
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LIMA, noviembre 9.- Tras dejar una estela de éxito y miles de fans afónicas de tanto cantar con sus dos presentaciones en Santiago de Chile, RBD enfilaron al norte, a Perú, para conquistar la capital del país limítrofe en uno de sus masivos shows.
En eso estaban, en pleno espectáculo, los seis chicos en el escenario saltando y arengando al público, que desgarraba sus gargantas coreando “Y soy rebelde, cuando no sigo a los demás…”, cuando Maite (la morena) en un arranque de furor, no halló nada mejor que gritar a viva voz “¡Arriba Chile!”.
Tal como cuando el inolvidable Chavo del 8 “metía la pata” en la clase del Profesor Jirafales, todos se quedaron mirando, estupefactos. La cantante, habiéndose dado cuenta del tropezón, quiso arreglarlo sobre la marcha con un “Perdón, ¡Arriba Perú! Se me fue la geografía”.
Pero ya era demasiado tarde y la rechifla general que inundó el estadio se escuchó hasta en Arica. Porque aparte del desaire de desconocer el país en el que están tocando, sabido es que los habitantes de la tierra del cebiche no guardan especial simpatía por los de la cueca y la empanada.
Pero para fortuna de los intérpretes de “Sálvame”, el público asistente olvidó el incidente con el correr de los minutos, con la frescura de la adolescencia, y siguió vibrando con el espectáculo brindado por Anahí, Alfonso, Dulce, Cristián, Christopher y la mencionada Maite.
Porque esta última quiso rehacerse ante el público implorando perdón: “Los quiero muchísimo y deseo que me perdonen, pero es que los nervios y mi poco conocimiento en geografía hicieron que me equivocara, el sentimiento es lo que vale”. La premisa fue acogida por la legión púber y así olvidaron lo ocurrido.
Pero no lo hicieron las crónicas de prensa posteriores, que no tuvieron conmiseración con los seis mexicanos. En Terra Perú, el cronista no titubeó en disparar: “No puedo demandar al grupo porque la entrada al concierto me la regalaron. Pero sí podría acusarlos de hacerme perder el tiempo presenciando un show por demás aburrido, poco original y predecible desde el momento de su inicio”.
¿Habrá influido en esa nefasta percepción el bochorno de la confusión geopolítica? Es probable, ya que además se notó especial saña en calificativos como “rebeldía hecha en Televisa”, “pop chicloso con tufillo a telenovela adolescente”, “un capítulo más de ‘Rebelde’ sobre el escenario y no un concierto de música”, y “tanta parafernalia se fue al tacho cuando los chicos comenzaron a ¿cantar?”. Remató con un impiadoso “aquí y en la China a eso se le llama bluff”.
